Kristina Velfu ahonda sobre el trabajo de la fotografía en México
Gracias a la fotografía podemos recordar momentos importantes de la vida íntima y pública. Su ejercicio es un culto a la belleza melancólica que conserva, a través de la imagen, un instante, un rostro conocido o una expresión fugaz. La fotografía es detener al implacable tiempo. Una forma de observación e interpretación de la realidad. A través de ella, atesoramos testimonio de lo vivido. El presente se vuelve tangible y las imágenes se convierten en memorias y registro.
Entre los géneros de fotografía como arte existe la fotografía arquitectónica, histórica, etnográfica, social, periodística, erótica, el retrato o incluso el collage en el que se interviene una imagen.
Actualmente vivimos en una inmediatez compulsiva de imágenes y podemos tomar fotografías de casi todo lo que nos sucede. Gracias a los teléfonos móviles ha sido revolucionado el mundo de la fotografía. Sin embargo, su esencia más profunda se mantiene intacta: responde a la necesidad de retener un instante.